"El desamor duele mucho. Eres capaz de todo por demostrarle a esa persona que le quieres: como estar esperando en la ventana todos los días a que él pase y se siente en el banco con su amigo para entonces bajar a la perra y hablar con él disimuladamente. Llorar todas las noches por él, porque sabes que le quieres mucho pero que él a ti no. Puedes ponerte celosa cuando él está hablando con una niña, sea quien sea. Te entra mucha rabia por dentro. Hasta eres capaz de grabarte su nombre en el brazo para demostrar que verdaderamente le quieres. No sabes que hacer, estás confundida y es que eso de que rechazen a una chica no trae mucha alegría que digamos...Sólo piensas en él y él seguramente ni se acuerde de ti. Escribes en todas partes que le quieres y cuando él lo lee delante de sus amigos dice: "Pues yo, a ella, no." Así es el desamor y si ese niño quiere algo contigo será lo que quieren todos: llevarte a su cama y luego ir diciendo cosas por ahí, para dejarte como una cualquiera."
"El desamor duele mucho. Eres capaz de todo por demostrarle a esa persona que le quieres: como estar esperando en la ventana todos los días a que él pase y se siente en el banco con su amigo para entonces bajar a la perra y hablar con él disimuladamente. Llorar todas las noches por él, porque sabes que le quieres mucho pero que él a ti no. Puedes ponerte celosa cuando él está hablando con una niña, sea quien sea. Te entra mucha rabia por dentro. Hasta eres capaz de grabarte su nombre en el brazo para demostrar que verdaderamente le quieres. No sabes que hacer, estás confundida y es que eso de que rechazen a una chica no trae mucha alegría que digamos...Sólo piensas en él y él seguramente ni se acuerde de ti. Escribes en todas partes que le quieres y cuando él lo lee delante de sus amigos dice: "Pues yo, a ella, no." Así es el desamor y si ese niño quiere algo contigo será lo que quieren todos: llevarte a su cama y luego ir diciendo cosas por ahí, para dejarte como una cualquiera."
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